Las autoridades de la escuela encontraron drogas en el casillero de una compañera de quinto grado de nuestra hija. Se suponía que eso no debía ocurrir a esa edad. Yo ni siquiera había ido todavía a la reunión obligatoria para padres sobre "Cómo hablar a su hijo acerca de las drogas". Pero cuando Cristina llegó de la escuela ese día, tuve muy en claro que era el momento indicado para tener nuestra primera conversación seria.