Paso # 4: Enseñe la verdad sobre las consecuencias. La vida está llena de decisiones, y cada decisión tiene una consecuencia. Algunas consecuencias son automáticas e inherentes: si tocamos el fuego nos quemamos, si corremos frente a un auto en movimiento corremos el riesgo de ser atropellados. Otras consecuencias son determinadas por las autoridades, tales como los maestros, los policías, etc. Como no podemos proteger a nuestros hijos de esta realidad, debemos empezar temprano a enseñarles que las decisiones que toman tienen consecuencias. La vida de estudiante es una serie de decisiones y consecuencias. El niño que golpea a otro probablemente tendrá que estar en penitencia en la oficina del director. El niño que no cumple con la tarea de la escuela quizás se quede sin recreo. Recuerde, nuestros niños eventualmente dejarán la protección del hogar y la relativa seguridad de la escuela, para enfrentar las consecuencias del mundo de adulto.