Todos podemos influenciar a otros para bien. Para lograrlo, necesitamos desarrollar ciertas cualidades como ser sensibles a las necesidades de los demás, ser congruentes con lo que decimos y hacemos y hacer las cosas sin esperar nada a cambio. Jesús, el buen pastor, fue el líder por excelencia. ¿Cómo lo logró? Siendo fiel a sus seguidores, amándolos, y cuidándolos con compasión y sin esperar nada a cambio. Escuchemos sus palabras:
... las ovejas reconocen la voz del pastor y se le acercan.
Él llama a cada una de sus ovejas por su nombre... camina delante de las ovejas,
y ellas lo siguen porque conocen su voz.
Juan 10:3-4 NTV
Te invito a que hoy busques a tu Pastor Jesucristo, escuches su voz y le sigas fielmente.
Estaré contigo
A lo largo de los años pasamos por muchas transiciones que a veces nos llevan por caminos insospechados. Algunas las pasamos airosamente y en otras desmayamos, hasta que por fin llegamos a la transición final que nos conduce a nuestro destino eterno. Pero no tenemos por qué hacerlo solos. El Señor nos dice en su Palabra:
Escucha lo que te mando:
Esfuérzate y sé valiente. No temas ni desmayes, que yo soy el Señor tu Dios,
y estaré contigo por dondequiera que vayas.
Josué 1:9
Hoy te invito a que, cuando estés enfrentando una transición, te tomes de la mano de nuestro Señor Jesucristo y camines con la seguridad que te da su presencia.
Busca primero
Sin duda alguna, en la vida las cosas cambian: cambian las circunstancias, las condiciones, los sentimientos. Y nuestra reacción ante los cambios va a determinar nuestra adaptación. En la Biblia tenemos el ejemplo de Abraham. Cuando el Señor le dice: "Vete de tu tierra ... y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré", Abraham fue a prepararse para seguir la dirección de Dios.
Jesús nos dice:
"Busquen primeramente el reino de Dios y su justicia,
y todas estas cosas les serán añadidas."
Mateo 6:33 RVC
Amigo, hoy quiero animarte a que, antes de seguir adelante con los planes de cambio que puedas tener, hagas un alto, busques la dirección de Dios y te prepares intencionalmente para seguirla.
Dios a nuestro favor
Si analizamos las cosas que no hemos logrado en la vida, nos damos cuenta de que muchas veces la causa fuimos nosotros: dejamos cosas sin terminar o las terminamos a último momento; tratamos de hacer algo tan perfecto, que terminamos no haciéndolo; o ponemos excusas para no hacer algo, como que no va a funcionar, o no puedo, o es imposible, etc. En su Palabra, Dios nos dice:
Sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de los que lo aman...
si Dios está a nuestro favor, nadie podrá estar en contra de nosotros
(Romanos 8:28,31). RVC
Querido amigo, no estás solo: Dios está contigo, ¡siempre! Búscale y confía en su ayuda.
Todo lo puedo
Cuánto nos limitamos porque creemos que nuestro pasado nos persigue, que fallar es fracasar, porque 'qué va a decir la gente', o porque nuestra vida sería perfecta solo si tuviéramos tales y cuales cosas. La realidad es que todas esas limitaciones son ciertas solo en la medida en que nosotros las aceptemos como verdaderas. Aun habiendo sufrido toda clase de peligros, males, azotes, naufragios, persecución y cárcel, Pablo, apóstol de Jesucristo, pudo decir:
Sé vivir con casi nada o con todo lo necesario. He aprendido el secreto de vivir en cualquier situación...
Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo, quien me da las fuerzas.
Filipenses 4:12-13 NTV
Amigo, es mi oración que estas palabras de Pablo te alienten en el camino de tu vida.
Sobre la roca
A pesar de los muchos caminos y oportunidades que la vida nos ofrece, con facilidad desperdiciamos nuestros días y talentos trabajando solo por el dinero o porque creemos que no tenemos otra opción, olvidando que lo que cosechamos en la vida depende directamente de en qué invertimos nuestros recursos. Escuchemos lo que dijo Jesús:
A cualquiera que me oye estas palabras y las pone en práctica,
lo compararé a un hombre prudente que edificó su casa sobre la roca.
Cayó la lluvia, vinieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa,
pero ésta no se vino abajo, porque estaba fundada sobre la roca.
Mateo 7:24-25 RVC
Es mi oración que, si aún no lo has hecho, comiences a construir tu casa sobre la roca.