La tecnología

Vivimos en una era donde la tecnología facilita nuestras vidas y nos conecta como nunca antes. Sin embargo, su uso desmedido puede robar nuestro tiempo, atención y afectar nuestra relación con Dios y con los demás. La tecnología en sí misma no es mala, pero su abuso puede desordenar nuestras prioridades y hacernos perder el equilibrio. La Biblia nos llama a vivir con sabiduría, usando las herramientas que tenemos de manera que no nos aparten del propósito divino. En Proverbios 25, se nos advierte:
“¿Te gusta la miel? ¡No comas demasiada, porque te darán ganas de vomitar!” Proverbios 25:16 (NTV)
Lo mismo ocurre con la tecnología: si la usamos en exceso, puede tener efectos negativos. Como cristianos, debemos discernir cómo aprovecharla para edificar nuestras vidas, sin que nos controle ni nos desvíe de nuestra relación con Dios.
La tecnología
